La vida es un laberinto

Es curioso lo que ocurre en los laberintos. Encuentras un camino, lo coges y caminas decidido por él hasta que te topas contra un muro. Deshaces el camino que habías andado, llegas al punto de partida y vuelves a intentarlo con otro camino distinto. Y repites el proceso varias veces, hasta que finalmente das con el camino correcto que te lleva directamente hasta la salida, hasta la meta. 

Precisamente eso es la vida... Un gran laberinto repleto de caminos sin salida, indicaciones incorrectas y pasos que no te llevan a ningún sitio, pero siempre con una salida a tu alcance esperando a que llegues hasta ella. Y parece difícil, pero a fin de cuentas, los laberintos no son más que un juego de niños. Quizás ese sea el secreto para tener éxito en la vida: no perder jamás la ilusión y las ganas de un niño.

Comentarios

  1. Anónimo13 de mayo de 2015, 17:01

    Muy interesante, pero bastante optimista también. ¿Estás segura de que al final siempre encuentras el camino correcto? No lo se, yo conozco demasiada gente vuelve una y otra vez al mismo muro, sigue siempre el mismo camino y acaba pensando que no hay salida, cuando realmente no la busca de verdad.

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    1. Unknown14 de mayo de 2015, 21:02

      No he dicho que siempre encuentres la salida o el camino correcto... Lo que digo es que siempre hay salida, otra cosa es que te rindas antes de encontrarla o que te canses de seguir intentándolo. Por eso lo de no perder las ganas ni la ilusión ;-)

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