Te miro y no consigo verte
Sé lo que intentas cuando me buscas, y siento decirte que esta vez no lo conseguirás. Sé que vienes tratando de encontrar a la que siempre ha estado para darte unas palmaditas en la espalda, buscando que te de la razón con mis palabras y que diga que haces la correcto. Pero siento decirte que esta vez no. Esta vez no seré yo quien te apoye ni quien te ofrezca palabras de consuelo que te sirvan como excusa para seguir pensando que eres la víctima de la situación.
Lo siento, pero no puedo decirte algo que no pienso, ni puedo darte la razón cuando pienso que en esta historia, la única culpable eres tú. Se te llena la boca cuando se trata de culpar al resto, y te falta tiempo para repetir una y otra vez aquello de "qué malos son los demás y pobrecita soy yo", pero cuando se trata de hacer algo al respecto simplemente bajas la mirada y te resignas a seguir como hasta ahora, creyendo que no puedes hacer nada por cambiar la situación cuando lo cierto es que tú eres la única que tiene el control, la única que puede acabar con todo con sólo un movimiento. Pero no. Es mucho más fácil tener un motivo para quejarse y vivir buscando la compasión que atreverse a revelarte y coger por fin las riendas de la situación.
Sí, reconozco que es muy duro tomar esta actitud ante alguien a quien quiero, y aunque no lo entiendas, esto también me duele. Pero me da pena no poder reconocerte cuando te miro, y ver en ti a una persona cobarde y resignada que se ha convertido en una víctima de sí misma. Y sé que seguramente te hagan daño mis palabras, y que pienses que has dejado de importarme, pero es precisamente porque me importas por lo que soy incapaz de mirarte a los ojos y verte así.
Te conozco muy bien, y sé que esta no eres tú. Sé perfectamente que detrás de esta persona cobarde y asustadiza se esconde la persona que yo conocí un día, esa que no se rendía ni se hacía pequeña ante nadie, y que en más de una ocasión me animó y me dio fuerzas para que luchara. Y no sabes cuánto la echo de menos. Pero espero que por lo menos esto sirva de algo y te abra por fin los ojos y para que vuelvas a recuperar el control de tu vida... Tardes el tiempo que tardes en volver, yo estaré aquí esperando a recibir de nuevo a mi amiga.
Lo siento, pero no puedo decirte algo que no pienso, ni puedo darte la razón cuando pienso que en esta historia, la única culpable eres tú. Se te llena la boca cuando se trata de culpar al resto, y te falta tiempo para repetir una y otra vez aquello de "qué malos son los demás y pobrecita soy yo", pero cuando se trata de hacer algo al respecto simplemente bajas la mirada y te resignas a seguir como hasta ahora, creyendo que no puedes hacer nada por cambiar la situación cuando lo cierto es que tú eres la única que tiene el control, la única que puede acabar con todo con sólo un movimiento. Pero no. Es mucho más fácil tener un motivo para quejarse y vivir buscando la compasión que atreverse a revelarte y coger por fin las riendas de la situación.
Sí, reconozco que es muy duro tomar esta actitud ante alguien a quien quiero, y aunque no lo entiendas, esto también me duele. Pero me da pena no poder reconocerte cuando te miro, y ver en ti a una persona cobarde y resignada que se ha convertido en una víctima de sí misma. Y sé que seguramente te hagan daño mis palabras, y que pienses que has dejado de importarme, pero es precisamente porque me importas por lo que soy incapaz de mirarte a los ojos y verte así.
Te conozco muy bien, y sé que esta no eres tú. Sé perfectamente que detrás de esta persona cobarde y asustadiza se esconde la persona que yo conocí un día, esa que no se rendía ni se hacía pequeña ante nadie, y que en más de una ocasión me animó y me dio fuerzas para que luchara. Y no sabes cuánto la echo de menos. Pero espero que por lo menos esto sirva de algo y te abra por fin los ojos y para que vuelvas a recuperar el control de tu vida... Tardes el tiempo que tardes en volver, yo estaré aquí esperando a recibir de nuevo a mi amiga.
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