Mini-sueño: Aguanta que ya no queda nada

Te descubro lanzando palabras al viento para que sea él quien se las lleve, y mientras te imaginas siendo tú quien le susurra al oído. No te avergüences ni trates de ocultarlo que te delatan tus suspiros, tu cuerpo grita que te mueres por tenerla otra vez a tu lado...

Tranquilo, no pierdas la calma que pronto el aire gana el pulso contra el tiempo y la trae otra vez aquí contigo, y entonces será ella quien te hable al oído, quien te susurre que ya no se aguantaba más las ganas de dormir entre tus brazos, que se moría por dejarse enredar definitivamente por tus lazos.

Aguántate las ganas que ya casi no falta nada, no dejes que tus nervios ganen la batalla. Aguanta. Aguanta solo un poco más que ya casi no falta nada, y en cuanto vuelvan a cruzarse vuestras miradas te darás cuenta de que este tiempo de espera ha valido la pena.

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