Soñando con el amor eterno

Hoy me desperté después de un sueño.
Un hombre de camino hacia algún lado.
No sé hacia dónde ni el por qué.
Sólo sé que caminaba hacia algún lado.

Era un pasillo oscuro castigado por el tiempo.
Quizás de un edificio abandonado.
Avanzaba sin temor e iba descalzo.
Daba la sensación de andar buscando algo.

De pronto en el pasillo un sobresalto.
A unos metros derrumbándose el tejado.
Y la luna se hizo un hueco y fue alumbrando
cada metro de este edificio desolado.

El hombre se sentó en aquel pasillo.
Y aunque parezca extraño sonrió tranquilo.
A su lado nada más que polvo y trastos viejos.
Acompañando a aquel molesto olor añejo.

Al final del pasillo un retrato envejecido.
Una foto de dos novios con un mensaje escrito:
"no importa donde vaya, volveré contigo".
Frente aquel retrato susurró un te quiero.
Y mientras lo miraba poco a poco se quedó dormido.

Al despertar aun vivía en mi recuerdo
la última imagen de aquel sueño.
Y empecé la mañana sonriendo.
Soñando que sigue existiendo el amor eterno.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Ojalá pudieras verte como yo te veo

Si me permites un consejo

El acoso de los talifanes